[ENTREVISTA] Ana Agorio: “Me gusta pensar el territorio y el paisaje descompuesto como metáfora de la acción geológica”

Entre las ruinas de las abandonadas oficinas salitreras, en medio del Desierto de Atacama, la artista uruguaya Ana Agorio realizó su residencia en la región de Antofagasta entre marzo y abril de 2019.

 

“Le interesaba cómo el agrietado vaivén geográfico desata comportamientos psicosociales y despierta ciertas crisis vinculadas a la educación y la geología” nos dice la curadora Loreto González, describiendo la intenciones de Ana al enfrentar el proceso de investigación que la llevó de aquellas grietas geológicas y geográficas a interiorizarse en otras igualmente profundas, aunque invisibles y dolorosas: las que dejó la historia en los habitantes del desierto.

 

Estos son los antecedentes de la exposición que la artista está preparando y que presentará en la próxima edición se SACO Ahora o nunca (septiembre – noviembre 2020), en un proceso que fue posible gracias al programa de intercambio internacional de artistas del Espacio de Arte Contemporáneo de Montevideo, Uruguay (EAC) y SACO.

 

Es desde Uruguay que Ana conversó con nosotros a poco tiempo de haber inaugurado su exposición Réplicas en la ex cárcel de Miguelete, en el marco del décimo aniversario de EAC.

 

Uno de los procesos más interesantes e intensos de las residencias es el descubrimiento de información, personas y antecedentes que hacen mutar las ideas y proyectos originales, ¿cómo viviste ese proceso durante tu residencia y cómo se reflejará en tu exposición en SACO?

 

La experiencia de residencia fue maravillosa. Como bien decís, gran parte de la riqueza de esta experiencia se encuentra en la mixtura entre las ideas propias en nuevos contextos. La idea de re-construcción como punto de partida para explorar en Antofagasta se vio atravesada por la intensa realidad de la región. Una a una fueron apareciendo las diferentes grietas que le aportaron nuevos sentidos a mi investigación. La profunda necesidad de hacerlas visibles fueron el motor de los diferentes ejercicios desarrollados en residencia.

 

Siguiendo la pregunta anterior, ¿cómo ves el proceso de reedición y curaduría de tu obra cuando regreses a Antofagasta? ¿Cómo sientes que será ese retorno, considerando los profundos cambios que han ocurrido en tan solo un año?

 

Réplicas fue resultado de la investigación en residencia combinada con el gran despertar chileno posterior en su dimensión más amplia. Fue muy emocionante trabajar en ello y queda mucho por hacer. Sin ir más lejos, hoy tenemos un festival que cambia su fecha por un virus global que afecta al mundo, y directa o indirectamente también al movimiento social y proceso constitucional chileno. Estas nuevas grietas o supra grietas dan lugar a nuevos análisis del contexto, y sus respectivas réplicas en el futuro. 

 

¿Cómo fue el llevar los resultados de la investigación realizada en el desierto y salitreras hacia la ex cárcel en Montevideo, hacia EAC? ¿Visualizas alguna relación entre las salitreras de siglo XIX y una cárcel de un periodo parecido? ¿Qué simboliza la grieta como punto de encuentro entre dos sitios que parecen tan diferentes?

 

Tu pregunta me hace reflexionar en una línea que no había explorado. La ex cárcel es hoy (en parte de su gran extensión) EAC, Espacio de Arte Contemporáneo y Museo de Historia Natural. Años antes fue Centro de Diseño Industrial, donde estudié algunos años. Este edificio declarado Monumento Histórico, con el paso del tiempo transformó sus usos acogiendo nuevos programas vinculados la cultura, ciencia y educación. No puedo evitar pensar en alguna de las líneas de viviendas obreras de Chacabuco, como espacios para la reflexión contemporánea de diferentes artistas. 

 

¿Cómo influyó el espacio en el montaje de tu obra en Montevideo?

 

Fue naturalmente oportuno. Algo muy curioso que ocurrió durante el montaje, fue la aparición de la obra de Ricardo Lanzarini … cómo llegar a las masas? realizada en la primer temporada del EAC diez años atrás en esa misma celda. Significó mucho para mi obra ese hallazgo cuasi arqueológico en la corta historia del EAC. Lanzarini en aquel entonces elaboró una carta al Ministro de Educación y Cultura Doctor Ricardo Ehrlich para retirar la obra de la pared a un bastidor para su conservación. Su pedido no fue efectuado y la obra permaneció en la celda. Sobre ella y tantas otras pasaron 36 temporadas de artistas. Hoy, una parte de esa obra vuelve a estar en primer plano. 

 

Desde la creación y también de la emoción, ¿cómo asumes el fuerte lazo que se da entre las grietas geográficas y geológicas en el desierto, y las grietas como heridas abiertas de la historia reciente de Chile?

 

No soy experta en geología ni mucho menos, pero me gusta pensar el territorio y el paisaje descompuesto como metáfora de esta acción. Hay mucho material inédito desarrollado en residencia, que quizá tenga su momento en SACO para salir a la luz.

 

Créditos fotografías exposición Réplicas en EAC: Cecilia Gervaso