Exposiciones simultáneas en varias sedes culturales de la ciudad, incluidas las propuestas de artistas locales reunidas en la muestra “Ven a Mi Casa”, conforman esta primera etapa del encuentro, que en su sexta versión reflexiona sobre el amor en nuestros tiempos y consolida su relevancia a nivel continental.
Es una ciudad que crece aceleradamente, con altas tasas de inmigración desde otros países de Latinoamérica, y donde se concentran capitales inestimables, producto de la actividad minera. Estilos de vida opulentos, pero siempre el contraste con la pobreza y la cesantía de muchos; con todo esto, Antofagasta ha sido calificada – por cierto, exageradamente – como “La Dubai chilena”, por sus altos estándares de desarrollo.
Después de haber diseñado un gran plan de gestión, una vez más la Semana de Arte Contemporáneo (SACO), financiada por 2% FNDR de Cultura 2017, Antofagasta, está aportando en la descentralización del conocimiento, lo que permitió la generación de esta instancia de encuentro entre los artistas, los creadores locales, el público y los estudiantes del norte del país.
Estas iniciativas fueron organizadas por Colectivo Se Vende y presentadas por Minera Escondida, operada por BHP, a través de la Ley de Donaciones Culturales.
En esta ciudad, capital de la II Región, sin embrago, no existe una escuela universitaria de arte desde que fueron desarticulados los estudios superiores humanísticos y artísticos por la dictadura militar. Esta situación no impide que sean muchos los interesados, aficionados y más avezados en las diversas prácticas de la visualidad, desde las tradicionales pintura y escultura, hasta las expresiones más actuales del arte experimental, y los géneros conceptuales y procesuales. Es en gran parte por eso, y por un fuerte perfil pedagógico, que la realización de SACO, la Semana de Arte Contemporáneo de Antofagasta, ha alcanzado un alto impacto en la comunidad local.
El encuentro fue creado por el Colectivo Se Vende, dirigido por la pareja que conforman Dagmara Wyskiel, artista polaca residente en Chile, y el productor Christian Núñez. Ya próximos a iniciar su sexta versión, buscan acentuar la labor mediadora a través de su programación. Si bien la parte central se iniciará en agosto, con la exposición “Amor. Decadencia y Resistencia” -con varios proyectos seleccionados por convocatoria a toda Latinoamérica, que se exhibirán en el emblemático muelle salitrero Melbourne Clark – las actividades de SACO arrancan ya este 21 de julio con el “Aluvión Visual”, una serie de muestras de artistas chilenos en varios puntos culturales de la ciudad y una intensa agenda denominada “En el Marco de SACO”, que comprende jornadas para profesores, talleres, conversatorios y otras acciones que han demostrado en las versiones anteriores, el importante sentido que tiene involucrar y compenetrar al público nortino con las distintas manifestaciones del arte contemporáneo.
En esta primera etapa, SACO emprendió acciones variadas, integrando, cómo ha sido habitual, a las diferentes entidades culturales y educacionales de Antofagasta. El Museo Artequín local, por ejemplo, mostró parte de su propia colección, como una propuesta curatorial en torno al Amor, que es la problemática central de esta sexta versión. Por otra parte, estuvo en la región la destacada artista polaca Julia Poplawska no sólo para desarrollar una actividad creativa junto a su compatriota Dagmara Wyskiel – con quien rodó el tráiler del video-arte “Paleontología del Amor”- sino también para compartir su película “The Place” y realizar sesiones de revisión de portafolios audiovisuales con los creadores de la zona que buscaban una opinión especializada.
El artista argentino Marcos Figueroa, jurado de la convocatoria latinoamericana de SACO6, realizará talleres de actualización y estimulación creativa para profesores de artes visuales. Estas instancias de reforzamiento de la educación artística, a través de herramientas para la innovación en el aula, han sido en estos seis años, un rasgo característico del programa “En el Marco de SACO”.
SACO otorga un énfasis a lo local, educando al público nortino en los conceptos que hoy se manejan desde las artes, un territorio a veces complejo de entender, pero tan necesario para nuestro auto conocimiento y crecimiento como sociedad. Pero ese localismo y esa responsabilidad con las audiencias, responde precisamente a lo que busca hoy el arte contemporáneo del mundo entero: el debate y el reforzamiento de la consciencia crítica a través de las propuestas visuales. Es por eso que este encuentro, desde Antofagasta, se está transformando poco a poco en una instancia relevante e influyente para la visualidad latinoamericana.
Mediante el programa Otras Instituciones Colaboradoras, el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, designó importantes recursos para el funcionamiento de ISLA, centro donde se ha diseñado todo el programa de la Semana de Arte Contemporáneo SACO6. Este lugar gracias al apoyo del CNCA es reconocido como uno de los recintos más importantes de creación, formación e intercambio del circuito de producción artística, siendo un aporte en el sector cultural, ante una comunidad con la que se relaciona constantemente.
