Acaymo S. Cuesta y el arte como herramienta que denuncia el fraude del poder político y económico

El artista procedente de Islas Canarias, Acaymo S. Cuesta, llegó a Antofagasta para participar del circuito expositivo museo sin museo. Su trayectoria se destaca por entender la configuración del sujeto y la historia como un contenedor de pulsiones irracionales provocadas por agentes externos y su interés está centrado en la utilización de la palabra en cuanto a la conformación del individuo y de qué forma ésta puede ser utilizada como herramienta para controlarlo, adoctrinarlo, amansarlo o distraerlo.

 

Desde hacía más de un año, estudiaba no solo los fenómenos históricos recientes ocurridos a partir del estallido social de octubre de 2019, sino que los hitos históricos que habían llevado a él. Esa investigación lo llevó a crear ¡Exijo una explicación!, el montaje que realizó en la Sala de Arte de Fundación Minera Escondida en Antofagasta.

 

La presencia de Acaymo S. Cuesta en Antofagasta fue posible gracias al apoyo del fondo PICE para artistas españoles que entrega Acción Cultural Española, Canarias CREA y Fundación Francis Naranjo. La participación del artista incluyó, además del montaje e inauguración de su exposición, un viaje de reconocimiento a Quillagua en el Desierto de Atacama y participación en diversos talleres e inauguraciones en el marco del festival SACO9. 

 

El análisis de esta exposición estuvo a cargo del curador Rodolfo Andaur, quien estuvo en Antofagasta para presenciar el montaje de la obra y conversó con Acaymo para desarrollar este texto.

 


 

Por Rodolfo Andaur*

 

Antofagasta es el epítome del neoliberalismo. Esta ciudad del desierto de Atacama, expone crudamente –a lo largo y ancho de su urbanidad–, las desgracias de un sistema económico en la cuerda floja.

 

Ante este impetuoso preludio, los efectos de la crisis psicopolítica y de la sindemia han impulsado un movimiento social que nos ha revelado un sinnúmero de signos y códigos sobre un instante heteróclito, no solo para el contexto chileno sino también para el panorama global. 

 

A partir de un sentimiento mayoritario de disconformidad de la población, podemos observar las consignas de una revolución cultural que ha construido una gráfica tanto desde la desazón del capitalismo, como de aquellas esperanzas cívicas, colectivas y colaborativas que han surgido en muchos barrios y campamentos informales de la ciudad. 

 

Dentro de este convulsionado paisaje, aparece la pulsión creadora del artista canario Acaymo Cuesta quien acude a revisitar estos emblemas callejeros para instalar, en una exposición individual, una serie de imaginarios acerca del cisma de la economía de mercado y su actual performance bajo una crisis sanitaria nunca antes vista. 

 

¡Exijo una explicación! La archiconocida frase del personaje de historietas Condorito, se transforma en el título de esta exposición, y también es el puntapié inicial de una lectura de los procesos de transformación epistémica que vivencia el orbe.

 

Desde estos parangones narrativos, Acaymo Cuesta ha trabajado, específicamente, con palabras y símbolos de las reivindicaciones callejeras de América Latina. Estos mantras tangibles e inconmensurables dan cuenta del fraude del poder económico, de sus principales promotores y detractores, quienes emergen en las historias, a cada instante, visualizando sus luchas, cánticos y poéticas. 

 

Por otro lado, el contexto de ¡Exijo una explicación! está marcado por las huellas del extractivismo de los recursos naturales, un hecho que también forma parte de los gatillantes de las actuales protestas. A partir de esta situación, los signos y códigos que este artista ha recogido son amalgamados con los (d)efectos de la Constitución de 1980 impulsada por Pinochet. Esta carta magna ha sido utilizada como el principal recurso político que justifica la indiscriminada expansión del neoliberalismo, por ejemplo, sobre el ecosistema de uno de los desiertos más secos del mundo.

 

No obstante, hace un par de semanas, una colectividad enardecida a través de un plebiscito histórico ha comenzado un proceso democrático para reemplazar la fatídica Constitución que la dictadura de Pinochet instaló hace cuatro décadas. Por lo que este instante sigue acumulando crónicas y personajes dentro del mismo barullo social que está candente en casi todo el país.

 

Finalmente, estas circunstancias de la contingencia en Chile justifican una exposición donde el pudor de los artífices elucubra otras incertezas ontológicas para que el oficio del arte confabule e instale un espacio de reflexión crítica siempre necesario para las artes visuales en Antofagasta. 

 

*Rodolfo Andaur: curador y gestor cultural. Su trabajo de campo se ha enfocado entre la contingencia política y los conceptos que rodean la cultura visual latinoamericana. Además ha organizado una serie de seminarios y talleres que reflexionan en torno al arte contemporáneo y la práctica de la curaduría expandida. Actualmente organiza viajes de exploración territorial en Canadá, Colombia y México. Más información en www.rodolfoandaur.cl

 


 

Accede aquí al recorrido 360º guiado por el artista y galería de fotos.