RESIDENCIA DE CELESTE ROJAS: EJERCICIOS DE ARIDEZ EN LA MEMORIA QUE PERDURA

Instituto Superior Latinoamericano de Arte ISLA cuenta con el financiamiento del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, a través de su Programa Otras Instituciones Colaboradoras. Proyecto seleccionado por el Ministerio de Cultura de la Nación Argentina- Becar Cultura, en convenio con su símil estatal en Chile.

Celeste Rojas (Argentina – Chile n. 1987), visitó Antofagasta en el contexto de su investigación en el Desierto de Atacama, donde desarrolla una iniciativa que reflexiona en torno a la idea de habitar, poniendo en cuestión la geografía del norte y resaltando aspectos como la sequedad, el aislamiento y las extensas zonas despobladas que invitan a abrir la percepción sobre hechos que han marcado la memoria del territorio.

Ante la pesquisa que la mantuvo en el norte de Chile, Rojas expresó “recorriendo el Desierto de Atacama realicé una residencia de investigación y producción para el proyecto Ejercicios de aridez, en el que llevaba trabajando todo el año pasado”.

La artista acudió a una zona aledaña a Calama, con la intención de investigar sobre una enigmática imagen que fue dibujada hace algunos años, la cual hace referencia a la dictadura cívico-militar encabezada por Pinochet.

La influencia del paisaje desértico

Al inicio de marzo nueve representantes de la escena local asistieron durante tres jornadas al taller de creación contemporánea “La influencia del paisaje desértico”. En base a la metodología propuesta por Celeste Rojas, los artistas presentaron ideas de obras, las que al final del ciclo formativo fueron discutidas colectivamente.

“Fue una práctica muy rica, ya que el grupo era diverso en edad. Por lo tanto, las reflexiones que ponían en discusión daban cuenta de un pensar y habitar el espacio del desierto particular y rico, lo que dio pie a que ellos construyeran proto-obras, luego de las intensas jornadas de trabajo. Fue muy enriquecedor para mi poder compartir con ellos y, aunque sea brevemente, ser parte de sus procesos era conocer diversas experiencias subjetivas, afectivas y personales, cruzadas con problemáticas locales complejísimas de lo que implica habitar esa zona”, agregó la artista.